La Inteligencia Artificial (IA) ha dejado de ser una promesa del futuro para convertirse en una herramienta clave del presente. Su impacto en el mundo del trabajo y en la gestión organizacional ya es evidente en múltiples sectores, tanto en Chile como en países desarrollados. Frente a este escenario, capacitar a los equipos en el uso y comprensión de estas herramientas es deseable y urgente.
En Chile, un reciente estudio de Entel Digital y el Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA) mostró que el 80 % de las grandes empresas ya ha incorporado soluciones de IA en sus procesos, mientras que el 70 % de las pymes también ha dado pasos en esta dirección. Sin embargo, más del 40 % de las organizaciones señala que la principal barrera para avanzar es la falta de capacitación del personal. En paralelo, el Centro de Innovación UC advirtió que, si bien la mayoría de las empresas reconoce el potencial positivo de la IA, existe un importante déficit de habilidades digitales entre sus trabajadores. Estos datos dejan claro que la tecnología está disponible, pero aún no se cuenta con el capital humano suficientemente preparado para sacarle el máximo provecho.
Países europeos como Finlandia, Alemania o España ya han implementado estrategias nacionales para formar a su fuerza laboral en IA, promoviendo desde cursos básicos hasta programas especializados. Estas políticas no solo apuntan a mejorar la productividad, sino también a reducir brechas de acceso y asegurar un uso ético de la tecnología. Chile no puede quedarse atrás. Además de optimizar procesos y reducir tiempos operativos, formar a los equipos en IA permite tomar decisiones más informadas, identificar oportunidades de innovación y responder con mayor agilidad a los cambios del entorno.
En el sector público, ya hay ejemplos concretos. La Contraloría General de la República ha comenzado a usar herramientas de análisis avanzado de datos para detectar irregularidades en licencias médicas, lo que demuestra que incluso en instituciones tradicionales la IA puede ser un motor de eficiencia y transparencia. A esto se suma el trabajo de CENIA, que ha capacitado a más de 2.200 personas mediante rutas formativas diseñadas especialmente para líderes y técnicos, abriendo el camino para una transformación responsable y participativa.
Capacitar en IA es transformar la forma en que se trabaja, se colabora y se toman decisiones. Significa preparar a las personas para convivir con tecnologías que ya están redefiniendo el mundo laboral. Y sobre todo, significa asegurar que el desarrollo tecnológico en Chile esté guiado por principios de equidad, inclusión y desarrollo sostenible.
